Las oraciones deben salir de nuestro corazón, las palabras que dirijamos al Dios o la Diosa deben ser palabras con respeto, humildad, dedicación y llenas de amor a todo lo que nos rodea, porque nuestros dioses están y son parte de nuestra existencia.
No hay una oración establecida, aunque si podemos compartir aquellas que nos lleguen al corazón, que nos guste para nosotros. Los wiccan tenemos la complicidad del compartir todo aquello que obtenemos porque solo así podemos aprender y evolucionar, crecer mentalmente y físicamente. Aquellas personas que no creen en nuestra fé, no pueden comprender nuestras oraciones, porque ser wiccan no es ser brujos como nos califican los incrédulos ignorantes, sino ser wiccan es ser brujos conscientes del mal y del bien, conscientes de las deidades mágicas a la que pertenecemos y que sin ellas la existencia humano no sería posible.
Pido aquellos que no conocen en su profundidad el significado der ser wiccan, se informen primero antes de juzgar. Quizás encuentren la libertad. Un wiccan no es bueno solo los domingos, ni se esconde en un confesionario, sabiendo que al salir de él, vuelve a ser bueno.
Un wiccan se confiesa a si mismo, reconoce sus faltas e intenta no volver a cometerlas. Un wiccan no le regala una limosna a un pobre que está pidiendo en la puerta de una igleisa para sentirse más "santo" y mejor persona creyendo que así ha ganado un trocito de cielo.
Por esta y muchas otras razones, una oración sale del corazón no de un libro escrito por y para las necesidades sociales del momento.
Aquí expongo algunas de mis oraciones, que pueden ser adoptadas por aquellos que lo deseen o bien para dar ideas de elaborar las propias.
Oración a la Diosa
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú que eres el alba; tú que eres la mañana,
cielo sin nubes, rosa de la aurora
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú, que eres la hierba fresca bajo los pies,
y el rocío, una joya de la tierra
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú que eres el bosque oscuro y tenebroso,
árbol, hojas, musgo y raíces
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú, que eres el agua que corre en los ríos.
arroyo de montaña que canta la vida
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú, que eres el sol que calienta la piel;
tú, que eres la nube que riega la tierra
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú que eres el mar que lame las rocas,
y la roca que juega con la espuma de la ola
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú, que eres fértil semilla y fruta madura,
dócil y silvestre en la mano del hombre
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Tú que eres el vientre que contiene la vida,
y la vida que surge después de cada muerte
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder
Envuélveme con tu amor, tú que eres el todo,
conserva mis ojos para que pueda observar,
conserva mi voz para que pueda cantar,
conserva mis manos para que pueda bendecir.
Oh, Gran Madre, ven a nosotros,
danos un signo de tu poder