Litha:Menor:21 junio H. N. / 21 diciembre H. S.

Otros nombres: Solsticio de Verano, Alban Heruin, (calendario Druida), Alban Hefin (Tradición anglo sajona), Bendición del sol, Día del Acopio (Gales), Whit Sunday, Whitsuntide, Vestalia (Antigua Roma), Fiesta de Epona (antigua Galia), Día de todas las parejas (Grecia), día de San Juan(Cristianismo). Feill-Sheathain (Pecti-Wiccans escoceses), Fiesta dell'Estate (Strega), Thing-Tides (Escandinavia), día de Cerridwen y su caldero (Inglaterra), día de la diosa ninfa Aine de Knockaine (Irlanda), Día del Hombre Verde (norte de Europa)

El rostro de la Diosa se ilumina con la luz del brillante Dios Sol, reluciente en su momento de máximo poder. Están a punto de ser padres, de ver el fruto de su unión en Beltane, y su felicidad llena la tierra de luz y color. Toda esta fertilidad baña la tierra entera y ellos, como reyes de la naturaleza, la contemplan con una sonrisa mientras se toman de la mano y disfrutan de su amor y de su unión. En este momento y más que nunca, les consideramos nuestra Madre y nuestro Padre, aunque por ser el día del año más largo y por tanto en el que más horas de sol tenemos, orientamos nuestras celebraciones especialmente al Dios, pues se encuentra en su máximo apogeo. Es un día para celebrar la vida que hay a nuestro alrededor, para ser conscientes de la plenitud de la naturaleza y la actividad que se está desarrollando. Nosotros mismos nos sentimos llenos de energía que tenemos que saber canalizar de la mejor manera posible.

Se cree que Litha, pronunciado Lith-ah significa "Fuego" o que es la derivación de una palabra anglosajona para denominar a la luna del sexto y séptimo mes. También la luna de junio es llamada luna de la miel debido al período de abundancia en esta época del año y porque la miel es el ingrediente principal en varias recetas tanto de comida como de bebida en el solsticio de verano. En esta fecha se solían celebrar muchas bodas, surgiendo el famoso término de la "luna de miel" como la de la noche de bodas.

Se celebra alrededor del 21 de junio y es conocido también por el término midsummer, es decir, medioverano. Si se retoma el calendario antiguo como referencia, el verano comienza en Beltane y acaba en Lughnasadh haciendo que Litha fuese justo la mitad del verano. El momento del solsticio es marcado por la entrada del sol en Cáncer, haciendo que el sea el día más largo del año y, por ende, la noche más corta.

El sol está en su cénit, el punto más alto en el cielo y es por ello que se considera como una festividad solar y de carácter masculino. Debido al hecho de tener al sol en su punto más álgido, se celebra la luz y el calor en todo su esplendor y magnificencia, celebrando la abundancia y riqueza de las cosechas al madurar. Se honra al sol como portador de vida y calor y también como purificador, sanador y redentor.

La gente se sobrecarga de energía con la llegada de los días calurosos y el exceso de actividad puede llegar a acabar en nerviosismo por lo que es conveniente saber encontrar el equilibrio perfecto. Hay que saber vivir el presente y apreciar los mejores momentos vividos sabiendo que no serán eternos y desconociendo cuándo se repetirá.

A partir de hoy, los días serán más largos y las noches más cortas. El solsticio es considerado como la cuarta etapa energética de la Rueda del año, marcando la mitad del año y del camino recorrido durante este por lo que suele ser tradición disfrutar de la puesta de sol desde una colina o una montaña para despedir al sol en su día de mayor gloria.

Es el momento en que los campos están llenos de esplendor y verdor y las frutas en su punto justo para ser recolectadas, la naturaleza está en su momento álgido de la vida antes de comenzar a declinar junto con el poder del astro rey.

Se honra la luz con representaciones de la coronación del joven Rey Roble que decaerá en la madurez del aspecto del Rey del Acebo a la llegada del invierno, simbolizando la victoria de la luz sobre la oscuridad. No debemos mal interpretar los conceptos de luz y oscuridad pues una es el complemento de la otra, son el equilibrio de nuestras propias necesidades y una no podría existir sin la otra.


En las tradiciones druídicas es considerado un Sabbat Mayor que indica el punto medio entre los equinoccios o como decían los druidas "el punto medio entre la luz de la tierra y la luz del agua". En la Wicca, sin embargo, es un Sabbat Menor. Los Sabbats menores son aquellos que celebran puntos astrológicos que cambian las estaciones y los Sabbats Mayores son las mitades y puntos álgidos de éstos por ello, los solsticios y equinoccios son considerados como los puntos fuertes de una estación.

Debido a la importancia de los solsticios, muchos círculos de piedra, como Stonehenge, fueron orientados y alineados teniendo en cuenta la salida del sol en el solsticio de verano. Así mismo, se considera que los solsticios son una de las celebraciones más antiguas de la tierra pues no sólo constan evidencias de sus celebraciones en la prehistoria sino también en culturas como la mesopotámica y la maya

La simbología típica de este día son la lanza del Dios y el caldero de la Diosa como representación del poder de uno y la generosidad de la otra. Es época de sacrificios con el fin de tener una cosecha abundante, nada puede asegurar que las cosechas serán buenas, pero no por ello debemos renunciar a la fe. Litha nos dice que puede que alcancemos nuestros deseos y sueños pero que para ello quizá halla que dar un paso arriesgado, la confianza en que lograremos lo que buscamos es lo que nos debe ayudar a tomar una decisión a veces drástica para lograr lo que buscamos sin miedo a una posible terrible consecuencia.

Si no arriesgamos, quedará la duda y la frustración de no haber conseguido aquello que anhelábamos. No debe haber medias tintas: o se hace algo o no se hace, un extremo u otro, pero nada debe quedar a medias. Es tiempo de extremismos y pasiones de todo tipo pero, sobre todo de las bajas como la lujuria y la crueldad, el orgullo, las imprudencias, la irresponsabilidad...

La razón se ve nublada por las emociones y estas pasiones, convirtiendo este día en una difícil prueba a superar: no perder el norte y seguir unidos sin permitir que la individualidad se apodere de nosotros. Es el momento de la alegría, de estar repleto de vida sin dejar de estar atento a la llegada de Yule que traerá consigo de nuevo la calma y la oscuridad. Por eso en esta época se consolidan fuerzas, energías y pensamientos y el erotismo apasionado vivido en Beltane se transforma en algo más maduro como lo es el amor de padres e hijos o entre amantes.

Además, nos dará en exceso, tanto que podemos asegurar que no nos va a faltar de nada en invierno y que aún sobra para compartir con los demás por lo que es bueno repartir nuestra cosecha con aquellos menos afortunados.

El joven Dios se transforma en el fuerte sol fuente de calor y luz viviendo su momento de gloria y máximo poder, su fuerza está en el punto más álgido pero pronto tendrá que morir una vez más para dar paso a la noche, al letargo. Al unirse con la Diosa nos trae toda la abundancia y riqueza de la naturaleza. Lugh, el dios sol, el buen dios, se encarga de nuestras cosechas y nos abastece de todo lo que podamos precisar.

El dios además se prepara para ser padre ya que la Diosa está en un avanzado estado de gestación por lo que se le rinde culto en honor a su fertilidad. Las deidades honradas en esta fecha son las Diosas Madres, la Pachamama, las diosas del amor y la fertilidad y todos los Dioses solares, Balder en la tradición nórdica, Lugh en la celta...


La escena típica de Litha es aquella en la que sus hogueras brillan durante toda la noche. Grandes hogueras de roble y abeto se encienden para celebrar la conexión de la vida con el sol y muchos son los que las saltan para purificarse y festejar el solsticio. Con las hogueras además se invita al fuego a ser parte de nuestra vida.

Si se colocan ramas y troncos pequeños con los extremos en alto, como formando una tienda india y se ponen los materiales más pequeños en el interior, arderá dando el aspecto de un pequeño sol. Pero, si no es posible tener una hoguera, bien se puede encender una lámpara de aceite, antorchas, velas votivas decoradas con símbolos solares o dibujos de rayos… si se tiene un caldero puede hacerse la hoguera en su interior o colocar una vela o lámpara de aceite dentro. En estos fuegos pueden quemarse aquellas cosas que deseamos alejar, o aquello que ya no nos es útil o nos provoca actitudes negativas.

Es tiempo de purificación, limpieza y transmutación mediante el fuego por lo que todo ello debe arder para poder seguir evolucionando sin las cargas del pasado. Para ello, puede escribirse en un papel aquello que se desea alejar y leerlo en silencio o en voz alta antes de echarlo al fuego visualizando cómo desaparece de nuestras vidas mientras las llamas lo consumen y nos ayudan a superarlo para ser más fuertes.

También pueden quemarse símbolos de esto, imágenes que lo representen, etc. La hoguera de esta noche, mantenida viva mínimo hasta la llegada de la medianoche traerá bendiciones al hogar de aquellos que la prendieron y del lugar donde se encendió. Pero, no debe pensarse que estos fuegos sólo son purificadores, también traen protección, la reproducción del ganado, la salud, la seguridad y la esperanza de que el sol brillará en lo alto el tiempo suficiente para que la cosecha sea de lo mejor por ello se cree que cuanto más alto se salten las hogueras mejores serán las cosechas, creciendo tanto como el salto dado.

La llama de Litha será una vela que se encenderá al ponerse el sol y quedará encendida hasta que se consuma por sí misma, pero que el fuego no falte en casa, velas de todos los colores, velas que brillen como el sol y, en el altar, preferiblemente, velas azules por el hecho de la entrada del sol en Cáncer, signo de agua.


Se encienden ruedas de paja para hacerlas rodar desde la cima de las montañas ladera abajo hasta que se apagan en su recorrido o al caer en las aguas de un río. Se cree que cuanto más tiempo dura la rueda sin apagarse, mejor será la cosecha y el resto del año. En las islas británicas lo que se quema son gigantes de paja y las familias dan tres vueltas en deosil alrededor de un círculo de piedras, portando antorchas. Otra opción es hacer un muñeco de maíz representando al Dios y quemarlo en la hoguera o el caldero para representar que a todo esplendor le llega el momento de decaer de nuevo.

En el cristianismo, se fijaba la guardia, es decir, se prendían las hogueras con el propósito de dar luz a los penitentes y peregrinos y a la vez se pretendía protegerlos con ellas de espíritus malignos. Saltan estas hogueras para atraer la buena suerte y las calles se iluminan con velas.

La gente va de hoguera en hoguera llevando cressets que son unos farolillos iluminados con una vela en su interior y que se enganchan al extremo de palos altos. En San Pedro Manrique (España) es tradición caminar por el fuego de las hogueras de la Noche de San Juan como muestra de su fe hacia la Virgen María de la Peña. Tres mujeres, jóvenes normalmente, a las que se conoce como "Móndidas" o puras llevan cestas de pan sobre sus cabezas como ofrendas a la Virgen que las bendecirá en este día. En este día, el pueblo goza de espectaculares carreras de caballos y bellas danzas que duran hasta el anochecer.

El solsticio es ante todo una celebración alegre en la que principalmente se festeja el poder del Dios antes de empezar a decaer y el embarazo de la Diosa así como nuestra propia capacidad para crear cosas y hacerlas crecer como bien pueden ser las cosechas. Todos los rituales de buena suerte así como los amorosos o las curaciones y las purificaciones se llevan a cabo en esta mágica noche en la que todo es alegría por los deseos que se han cumplido o por la certeza de saber que se cumplirán.

Hoy es día de dejarnos llevar por el gozo que el calor del sol nos da aunque no hay que olvidar que la exposición constante a sus rayos puede sernos dañino también. A pesar de ser un día de excesos, debemos encontrar el equilibrio. No olvidemos que somos como el sol, tenemos su misma capacidad para alimentar a nuestros semejantes y debemos ser capaces de ser tan brillantes como él, haciendo llegar la luz a aquellos que se encuentren en momentos de oscuridad.

Al amanecer, si se dejó el caldero preparado con agua en el exterior o donde pudiese recibir los primeros rayos solares, hay que mirar en él buscando tres rayos brillando sobre el agua que son el Awen de Cerridwen que concede inspiración poética y energía mágica. Cerridwen llenará nuestra vida de inspiración y poesía si recordamos este sencillo ritual de amanecer del solsticio.

Lo ideal en este día en el que el sol tiene un papel tan importante, es salir a celebrar a la calle, estar en casa lo menos posible y organizarcomidas campestres, barbacoas en el jardín o picnics en un parque con nuestros seres queridos. En los banquetes de esta fecha no pueden faltar la verdura, la miel y la fruta de verano: sandía, melón, frutos del bosque, duraznos, peras… Las comidas picantes, los asados a fuego, flambeados y salsas caribeñas o negras como el Cajun o doradas como el curry así como los pimientos mexicanos y las especias chinas nos recordarán el calor del día de hoy.

El postre será un rico flambeado:
una ensalada de frutas de la época calientes y rociadas con un buen licor que se quemará antes de servir. Es un postre perfecto a la puesta de sol así como beber una buena Queimada.La bebida será preferiblemente la cerveza clara o ligera o aquellas que lleven base de miel o zumos frescos de fruta de la estación.

El vino blanco, la sidra y el té de valeriana son bien recibidos en Litha. Durante la comida se comarte con los demás el recuerdo de aquellos momentos en el que fuimos felices en extremo, una anécdota que nos hizo reír como nunca, un record alcanzado, el día en el que se sintió la máxima felicidad...

Los más pequeños puede que no se diviertan mucho con esto por lo que si se les coloca un mantel blanco en la mesa o se reemplaza la manta típica de picnic por un mantel de papel blanco, podrán pasar la comida dedicándose a pintar imágenes de grandes soles, hogueras, hadas y cualquier otra imagen típica de esta fecha en él. Se pueden hacer juegos de niños como carreras y guerras de globos de agua en las que los adultos sean el Rey del Acebo y los niños el Rey del Roble, por lo que ellos vencerán demostrando su poder y serán coronados como reyes por este día. También podemos enseñarles a honrar al Sol siguiendo su trayectoria todo el día como si fuésemos un girasol más. Ser conscientes de su cambio según las horas. Un modo podría ser crear un reloj solar en el jardín o en una ventana y tratar de regirse por él durante todo el día.

Para ello, el día anterior se coloca un palo en una superficie con arena o en la hierba del jardín. A las 8 de la mañana se marca la sombra con una tiza o con un palo, lo mismo cada hora. Así al día siguiente, dependiendo de en qué marca se encuentre el reloj, sabremos la hora.

Así también nos daremos cuenta de cómo las sombras cambian, alargándose según el día va acabando y cómo el sol se refleja de diferentes maneras en las cosas como los ríos o las plantas. Aprovechando la fuerza solar de este día, se puede cargar un cuarzo transparente que será recogido al ocaso y que nos llenará de energía hasta el solsticio de invierno.

Los niños que nacen en Litha suelen ser personas buenas y generosas, de gran corazón y enorme elocuencia aunque con tendencia al derroche. Son personas drásticas y muy arriesgadas en las decisiones que suelen tomar pues son personas que aman la acción, los deportes y todo lo que conlleve estar al aire libre. Es de admirar su perseverancia y su carácter luchador.

Al estar en la naturaleza, debemos acordarnos de dejarlo todo tal como lo encontramos o incluso mejor, hacer una limpieza antes de abandonar el lugar, retirando bolsas de plástico, botellas… y dejar una ofrenda junto a un árbol para los elementales por permitirnos pasar allí el día.

Las plantas están brotando en la tierra, ayudémosla a crecer con abono, regándolas y liberándolas de las malas hierbas que crezcan a su alrededor impidiendo su buen crecimiento. Después de la comida se puede dedicar la tarde a la recolección de plantas explicándoles a los más pequeños de un modo sencillo y fácil de comprender el modo de recolección y sus propiedades.

Se les enseña a la vez que no somos los dueños de la naturaleza por lo que, si tomamos algo, aunque sea una flor, debemos pedir previo permiso a las hadas y los elementales y dejarles una ofrenda como por ejemplo un puñado de grano.

El mejor modo de decorarlo todo es con imágenes solares y adornos y lazos de llamativos colores como el rojo, el amarillo, el
naranja y el verde. Capullos de flores de esta época llenarán los
jarrones y hojas secas junto a guirnaldas de flores, potpourris, fruta, y flores veraniegas adornarán mesas y alféizares de ventanas así como altares vestidos con manteles rojos o naranjas e iluminados con velas doradas, rojas, amarillas y naranjas. La ofrenda más simbólica son flores con forma de sol o colores que lo recuerden como las margaritas, caléndulas, manzanilla, zinias, rosas, ruda, verbena, trébol, diente de león... y la recolección durante la noche para usarlas posteriormente en nuestros trabajos.

Es por esto precisamente que a la noche previa al solsticio se la conoce en España como "La Noche de la Verbena". La verbena es además la hierba del solsticio según los druidas por lo que es un adorno perfecto para el cabello en los festejos de Litha.. También se recoge agua de fuentes, lagos, estanques, arroyos o manantiales e incluso rocío de la mañana que serán más poderosos que nunca en esta época del año. Para honrar a la naturaleza también pueden hacerse ofrendas florales en rocas de
bosques o cercanos a nuestra casa.

El mejor modo de decorarlo todo es con imágenes solares y adornos y
lazos de llamativos colores como el rojo, el amarillo, el naranja y el
verde. Capullos de flores de esta época llenarán los jarrones y
hojas secas junto a guirnaldas de flores, potpourris, fruta, y flores
veraniegas adornarán mesas y alféizares de venatanas así como altares
vestidos con manteles rojos o naranjas e iluminados con velasdoradas,
rojas, amarillas y naranjas.

La ofrenda más simbólica son flores
con forma de sol o colores que lo recuerden como las margaritas,
caléndulas, manzanilla, zinias, diente de león...

El círculo
puede marcarse con ramas verdes, de roble sería perfecto pero es
complicado conseguirlas y piedrecillas; y debe haber miles de velas por
doquier si nos es imposible hacer una hoguera. También se colocan
imágenes solares, girasoles y un cuenco con miel en representación del
dulzor de la vida.

Alrededor del altar o sobre éste se dejan
objetos que representen objetivos alcanzados, situaciones que han
llegado a término o aquellas que deben o se desean superar para seguir
adelante. Estos objetos deben ser retirados antes de celebrar
Lughnasadh. No puede faltar el fuego, ya sea en el caldero o con una
llama votiva de un color cálido.

El rital empezará con una invocación al sol y con el caldero o un cuenco si el caldero alberga la hoguera, repleto de agua.


Antes
del ritual de esta noche se puede llenar un saquito con hierbas como
manzanilla, rosa, verbena, lavanda, violeta, hiedra, manzanilla o canel.
Enviar mentalmente los problemas, enfermedades y sufrimientos al saquito
según se va construyendo. Cerrarlo con una cinta roja y dejarlo sobre
el altar. Colocar el caldero cerca del altar o sobre éste y tener una vela roja en el altar para, tras cerrar el círculo y realizar las invocaciones necesarias, decir:


Prender el saquito con la vela roja y colocarlo en el caldero u otro recipiente que soporte el fuego mientras se dice:


Reflexionar sobre la purificación y sentir los poderes de la naturaleza limpiándonos con su energía.

Como ritos típicos a parte de las Uniones de Manos, están las dedicaciones y las reafirmaciones de votos a las Deidades por parte de aquellos que ya fueron iniciados con anterioridad. También se aprovecha para bendecir a las mascotas para que el sol les confiera su fuerza. Se hace un recordatorio de aquellos proyectos que nos propusimos en Samhain y se trata de retomar aquellos que no se han terminado o aún no se han llevado a cabo.

El ser mitológico del solsitcio es el dragón, con su fuego abrasador que nos recuerda al del Astro Rey y los colores que lo llenan todo son el dorado, amarillo y el rojo en representación de los rayos del sol y el verde como recuerdo del verdor de bosques y campos. El verde mar, el azul y el blanco se usan para representar el elemento agua que hoy también es importante y las rosas rojas adornan el altar junto con piedras tales como jaspe, esmeralda, ámbar, ojo de tigre, ojo de gato, jaspe, peridoto, venturina, rubí y cualquier tipo de cuarzo.


El aire se impregna de aroma herbal y floral siendo las favoritas la rosa, mugwort, hierba de San Juan, albahaca, perejil, menta, tomillo, violeta, sangre de drago, helecho, verbena, manzanilla, margarita, lirio, saúco, hijoho, espliego, artemisa, azucena, hiedra, milenrama, clavel, lavanda...

También maderas típicas de la fecha son roble, abeto, muérdago y acebo. Pero, cuando no se puede crear un sahumerio con estas mezclas, siempre se puede recurrir a un incienso de aroma fuerte o intenso con base de violeta, abeto, cedro, mandarina, romero, limón, olíbano, rosas, lavanda, tomillo, verbena y/o benjuí.

Son niños y merecen disfrutar del solsticio tanto o más que nosotros. Además son nuestro mayor tesoro, nuestra descendencia por lo que hay que demostrarles lo importantes que son.

Que si nosotros les dimos vida como la tierra, ellos son el sol de nuestras vidas, los que nos llenan y dan el calor necesario para seguir existiendo. Ellos son como el sol, con una capacidad de crecimiento y cambio asombrosa. Por ello, ¿qué mejor que una corona? Ésta debe ser cómoda y ligera para que no sienta que es una carga por eso, lo mejor es usar como base tallos de vid, coronas de flores o papel arrugado de los que se usan en manualidades, rafia o cintas de pelo anchas.

Todo esto es fácil de trenzar entre sí para darle forma y después entretejer los adornos que pueden ser flores, cintas, cuerdas de colores…

No debemos olvidarnos de coronarlos como reyes y de decicarles el día como sus fieles súbditos, elogiándoles su grandeza y recordándoles lo mucho que los queremos.

Con FIMO, plastilina, cartulina y miles de materiales más se pueden hacer soles para decorar la casa. Luego puede decorarse con paja, vid o flores cuyos colores recuerden al sol.

Algo que les gusta a los pequeños es llevar máscaras y hoy pueden aprender a hacer una máscara solar.

Los niños nos ven todo el día pendientes del sol, es un buen momento de que ellos también tomen conciencia de él por lo que vamos a animarlos a usar un reloj solar.


Albóndigas de Plátano
Banana Split
Batido de Celebración
Crema de zanahorias al curry
Dulce de Dioses (caramelos de miel)
Ensalada con Mango
Ensalada de Col
Macedonia de verduras
Ponche de frutas
Queimada
Salmón a la naranja