Necesitas:
Hojas secas o frescas de verbena.
Aceites de pétalos de rosas, de sándalo y de girasol
Dos velas azules.
Método:
Recoge o compra hojas de verbena en un día de luna llena, cárgalas a la
noche con la irradiación lunar, poniéndolas a esa luz sobre tus manos
extendidas mientras repites:
“ Infunde de luz mi planta sagrada,
con poder pleno tanto de día como de noche”
Una vez cargada la verbena, puedes guardarla para usarla cuando lo desees. Echa las hojas de verbena en agua hirviendo y deja que formen una infusión durante 10 minutos. Mientras tanto, diluye dos gotas de aceite de pétalos de rosa y cinco de aceite de sándalo en 25 ml de aceite de girasol. Peprara un baño, filtra luego la infusión, y viértela sobre el agua del baño y permanece dentro relajadamente durante al
menos 10 minutos para conseguir su efecto pleno. Luego en una habitación cálida, iluminada por las velas azules, practícate un masaje con los aceites.
Comienza con las piernas,frotando desde los tobillos a los muslos y sigue hacia arriba. Concluye cubriendo tus ojos con las manos mientras respiras hondo durante unos cuantos segundos.