La Apariencia Física De Los Celtas

Los celtas daban muchísima importancia a la apariencia física y al aspecto del individuo, como marca de valía personal y en algunos casos, posición social. De ellos se nos han dado descripciones opacas, sobretodo en lo que a físico y apariencia se refiere. Se deduce de los autores clásicos que los celtas (hombres y mujeres) eran “altos y de complexión fuerte”, o por lo menos de mayores dimensiones que sus contemporáneos griegos y romanos. A partir de este punto, todo son hipótesis basadas en la creencia preestablecida que identifica a los celtas con una raza distinta y definida. Historiadores griegos y romanos a menudo confunden germánicos y celtas con facilidad, por lo que el decir que los celtas eran “rubios” y de “ojos claros” queda finalmente como una preconcepción obsoleta que no se cumple de una forma generalizada. Es Diodoro Sículo el que da pie a muchas confusiones, pero también el que da una interesante descripción de los celtas –sobretodo galos, que ha determinado posteriores teorías sobre ellos:
“Los galos son altos, de complexión fuerte, y tienen la piel blanca y el pelo rubio, mucho más que el que la propia naturaleza les ha concedido, puesto que intensifican dicho color mediante métodos artificiales: siempre se lavan el pelo con agua caliza y se lo echan hacia atrás, desde la frente hasta la nuca. En consecuencia, su aspecto se asemeja mucho al de los sátiros y al dios Pan, ya que dicho tratamiento del cabello lo hace tan resistente y asto que no permite distinción alguna con la crin de los caballos.”(V, 28)

Cabello y vello corporal:


Ilustración de Peter Connolly

La mayoría de autores clásicos afirma que los celtas llevaban el pelo largo, tanto mujeres como hombres, cosa que entre los romanos y los griegos era visto como un tanto extravagante. Como dice Diodoro Sículo, los galos usaban el agua caliza para blanquear su pelo, y como si de una gomina moderna se tratara, le daban formas. Imaginando el resultado final, en el caso que el celta en cuestión tuviera el pelo largo, podía llegar a dar una impresión bastante intensa, sobretodo en el campo de batalla, donde se supone que esta práctica estaba más extendida. Pero la técnica del agua caliza no era ni mucho menos común a todos los territorios celtas, pues también tenemos cascos de bella factura hallados en asentamientos celtas tanto continentales como insulares, algo que demuestra que podía ser una práctica bastante reducida.

“Algunos se afeitan la barba, pero otros se la dejan crecer un poco, y los nobles se rasuran las mejillas y se dejan crecer el bigote hasta que les cubre los labios.” (Diodoro Sículo V,28) De estas palabras extraemos un extremo cuidado de la apariencia física y el nexo entre el bigote y la nobleza. El bigote seguramente era símbolo de un rango determinado, así como la cantidad de joyas y ornamentos que cada individuo llevaba encima. Muchos autores coinciden a decir que los celtas se afeitaban todo el cuerpo menos el bigote y la cabeza, y es muy posible que así lo hicieran, pues se han hallado navajas y rudimentarias esquiladores en el territorio de La Tène.

La forma física:



La obesidad era algo muy criticado entre los celtas, sobretodo en hombres guerreros, dado que estar obeso era símbolo de pasividad (algo inconcebible en una comunidad activa y organizada con una estructura como la celta). Estrabón escribe que: “Un hecho realmente curioso es que se esfuerzan por no engordar ni dejan que sus barrigas crezcan. Además, cualquier joven que rebase la marca de su cinturón, es castigado.” Es una curiosa idea en una sociedad en la que los banquetes y los excesos eran algo natural, pero corresponde plenamente a la concepción de una aristocracia guerrera. Por lo visto las mujeres también eran corpulentas, pues debían mantenerse fértiles y sanas. Aunque no se ha podido probar, seguramente eran las encargadas del campo (en las islas británicas, por lo menos) y de algunas tareas que implicaban fuerza física.

Adornos y joyas:



Tanto hombres como mujeres celtas, tanto en el continente como en las islas, usaban gran cantidad de joyas y adornos. Los hombres llevaban brazaletes, torques y cinturones muy bien adornados, con piedras y hasta esmaltes. Es posible que el torque implicara una distinción de rango, y sin duda la calidad de cada una de las joyas estaba ligada al rango del individuo. Diodoro Sículo decía “los celtas acumulan grandes cantidades de oro, que se usa como ornamento no sólo para las mujeres, sino también para los hombres; ya que adornan sus brazos y muñecas con brazaletes y llevan pesados collares de oro macizo, así como enormes anillos e incluso corsés de este metal precioso.” Las fíbulas y los broches también eran una pieza importante en su vestimenta, y la decoración y el material era el indicador de prestigio, pues podían ser de hierro, de bronce o de oro.
Las mujeres también llevaban collares y brazaletes hechos con cuentas de ámbar, piedra o incluso vidrio. Hay evidencias de pendientes similares a los romanos y de unos broches para cabello especiales, como agujas que se situaban en la parte de la frente y dibujaban una especie de diadema.

Maquillaje:


Imagen tomada de Gallica.co.uk

Hay pocas pruebas de lo que sería maquillaje en el sentido actual de la palabra. Simon James afirma en su libro, El Mundo de los Celtas, que “en el área de Britania se encontraron unos pequeños objetos de bronce identificados como molinillos cosméticos. Además, durante los años 20 a EC, Porpertius criticó a las mujeres romanas por ‘imitar a las britanas pintadas’; (…) quizás con una sombra de ojos o un colorete de importación.” A parte de estas afirmaciones, también contamos con el testimonio de otros autores sobre los pictos, cuyo nombre deben a unos supuestos tatuajes o pinturas rituales hechas con yerba pastel. Dado que la “hipótesis picta” (el origen indoeuropeo o no de estas gentes) no se ha solucionado, sólo podemos argüir que hubo una posible influencia recíproca entre los celtas y esos pictos, pues también se sabe que otros pueblos celtas británicos se pintaban o tatuaban, aunque no se sabe si era una práctica normal, ritual o bélica.

FUENTES:
Exploring the World of the Celts – Simon James
Los Celtas – TGE Powell
http://www.gallica.co.uk/celts/clothing2.htm
http://www.greyhawkes.com/text/celts.txt[/quote]